miércoles, 9 de octubre de 2013

Maurizio Ferraris. ¿Dónde estás? Ontología del teléfono móvil.

Generalmente, cuando hacemos uso de un objeto tecnológico que hemos asumido como parte de nuestra vida cotidiana, lo utilizamos mecánicamente y no hay un proceso de reflexión acerca de este uso. Si está es por algo y hay que encontrar un beneficio de ello.El celular en nuestros días se ha convertido en uno de estos objetos, que incorporándolo en nuestra vida diaria se vuelve indispensable, sobre todo porque incorpora diferentes acciones, como hablar, escribir, registrar y construir. De ahí que Ferraris lo considere el instrumento absoluto, pues en un teléfono móvil se han integrado funciones como televisión, radio, internet, mensajería, entre otros, sustituyendo máquinas inventadas anteriormente. 


No sólo es el hecho de su esencia la que se discute, sino también cómo repercute en nuestra vida y cómo lo ha hecho desde que apareció en su versión fija. En este sentido, su evolución ha determinado el comportamiento, los quehaceres y las disposiciones de las personas,  a tal grado de existir uno para cada individuo, haciéndose parte de la persona.


Finalmente, cabe destacar que con la modificación del objeto, inherentemente cambian también los usos y formas de percibir el mundo y se generan reglas sociales alrededor del mismo; cambian también las posibilidades, pues, como lo dicel el autor. “Toda invención técnica, cambia la vida” (Ferraris 2008: 91). 

viernes, 4 de octubre de 2013

Homo videns - La primacía de la imagen

La tecnología ha ido cambiando nuestras formas de acercarnos y percibir el mundo, lo cual puede naturalizarse al grado de decir que es normal, no obstante si se analiza a fondo, los artefactos tecnológicos tienen consecuencias. El artículo lleva a pensar en la televisión y sus implicaciones.

El hombre se ha constituido como tal a partir de su capacidad simbólica, que lo diferencia de los animales y esta capacidad se debe en parte al lenguaje. Esta forma de comunicación ha permitido la interacción humana a través del tiempo, no obstante, con la invención de la televisión y su utilización, el lenguaje se ha reducido a la imagen y con ello el ser humano pensante y reflexivo se ha reducido a un ser humano que sólo recibe imágenes.

En este sentido, la televisión no presenta críticas sociales y siempre es bien recibida a tal grado de hacerse cotidiana en la vida de las personas, obstruyendo la capacidad de abstracción del ser humano. Si de por sí esto parece grave, lo que realmente es perjudicial es cómo se utiliza esta tecnología para manipular a las masas, haciendo de ellas objetos y no sujetos. Y la gente de arriba de la estructura lo sabe muy bien a tal grado de considerarse “la esperanza de la gente”, lucrando con la ignorancia que el televisor produce; no sólo por su amplio contenido de imágenes sino por sus mensajes y los motivos por los que estos son creados, al servicio del circo.